Hace poco nos llevamos una alegría para el cuerpo, fuimos invitados a la inauguración de la nueva exposición surgida de la colaboración de La Caixa y el British Museum. Tras recibir en el Caixaforum de Madrid la muestra titulada “Los pilares de Europa”, con piezas clave de la colección medieval del museo, ahora llega “¡Agón!”, para presentarnos algunos aspectos de la Grecia antigua y en general del mundo clásico que quizá no son tan conocidos.
Para los antiguos griegos, Agón (ἀγών, en griego clásico) era la palabra que servía para definir o inspirar la contienda, el desafío o una disputa. Los retos, el ganar en cualquier aspecto de la vida, no eran entendidos como lo hacemos en la actualidad, de un modo individualista, sino que eran un elemento generador de un fuerte sentimiento de pertenencia una comunidad y a sus reglas, por lo que podemos decir que estos desafíos eran un elemento de cohesión social.
Ganar en sí no servía de nada, y estaba especialmente mal visto si se hacía sin respetar al contrincante. Las normas del combate, o de la competición, eran inviolables, y la igualdad de condiciones entre contrincantes resultaba primordial.
Los antiguos griegos pensaban que el espíritu competitivo era inherente a la naturaleza humana y que podía transmitir una fuerza positiva, innovadora y dinámica.
Basándose en este especial concepto, desde Caixaforum se las han apañado para articular esta exposición sobre la competición en la Grecia antigua, en la que una vez más brillan con esplendor propio los fondos del British Museum, lo que es un lujazo tan cerquita de casa. También trasluce el trabajo de Peter Higgs como comisario de la exposición, especialista en la materia, que ha logrado transmitir a través de la selección de piezas y el discurso expositivo el afán competitivo de griegos y romanos, que ha llegado a nuestros días tan desvirtuado.
¿Qué es lo que más nos ha impresionado a nosotros? Sobre todo, las piezas procedentes del Mausoleo de Halicarnaso, una de las maravillas del mundo antiguo, que nunca habían venido a España. Esta fastuosa tumba del rey Mausolo que ha dado ella solita nombre a los monumentos funerarios hasta la actualidad.
La sucesión de piezas es impresionante, pero a veces lo más sencillo también nos llaman más la atención como muñecas de terracota articuladas o la reproducción de un comerciante de quesos sentado sobre su mercancía. Pudieron ser juguetes y tal como se explica desde la organización de la muestra, en las palabras de Platón se expresa el convencimiento de que, si bien es necesario estimular el juego en los niños, también lo es inculcarles una estructura rigurosa. Desde temprana edad, los ciudadanos aprendían a seguir las normas y los criterios marcados por el poder establecido. Se les inducía lo que debían hacer por su género y condición, por lo que sorprendía esta muñeca articulada realizando moliendo cereales al lado de estatuas con mujeres bellamente ataviadas, todo era competición.
La comunicación: herramienta indispensable para dar a conocer el patrimonio histórico
En definitiva, más allá de la gran oportunidad de ver de cerca todas las magníficas piezas que componen “¡Agón!”, resultan especialmente interesantes los conceptos detrás de la muestra. Muchas veces pensamos que ciertas ideas son muy actuales, pero resulta que los que llamamos antiguos ya pusieron el germen de su desarrollo. Recuperar el sentido antiguo de la competición puede ser un ejercicio de cordura frente a los conceptos actuales de competitividad y emprendimiento.
No queremos dejar de destacar nuestra muy positiva experiencia al tener la oportunidad de visitar la exposición de la mano de la organización y la empresa responsable de la comunicación, en un acto al que acudimos junto a profesionales, gestores de comunidades virtuales y prescriptores de diferentes ámbitos, sobre todo relacionados con el turismo, experiencias y actividades, historia y arqueología, etc. Todos ellos se pueden considerar lo que llamaríamos “influencers”, reunidos en una de esas actividades o “acciones” que tanto se realizan en “marketing” para otro tipo de eventos, lugares o centros expositivos, pero muy pocas veces empleadas en sitios donde se pretende divulgar el Patrimonio Histórico, lugares que finalmente pretenden ser foco de atención de visitantes y medios simplemente por maniobras clásicas, como el boca-boca. La difusión y el alcance de la exposición durante esta última semana han sido increíbles para un ámbito cultural en el que nos movemos como el de la arqueología, en el que cuesta llamar tanto la atención. Mucho que aprender…